D
Ya no vuelve a su pesebre
A7
mi fiel caballo, no vuelve no,
ya no relincha de gozo
D
como cuando alguien lo acarició.
Maldita la suerte perra
D7 G
que un derrepente se lo llevó, ¡ay!
A7 D
pobre mi caballo bayo
A7 D
como he llorado cuando el murió
Y fue en este mismo tiempo
A7
ya van tres años que ayer cumplió
cuando una terrible peste
D
en el potrero se lo llevó
Parece que me llamaba,
D7 G
su pataleo me lo anunció, ¡ay!
A7 D
pobre mi caballo bayo
A7 D
cuánto he llorado cuando el partió.
Ahí me fui como flecha
A7
pero en cuantito me le acerqué
me clavaba sus ojitos como diciendo
D
cúreme usted.
Lanzaba unos mordiscones
D7 G
pero hay recuerdos que me dejó ¡ay!
A7 D
pobre mi caballo bayo
A7 D
cuánto he llorado cuándo el murió.
Después de un suspiro fuerte
A7
como una piedra se endureció
y yo con el alma rota
D
le dije bayo, adiós, adiós.
Lo metí en un hoyo grande
D7 G
y al enterrarlo pena me dió, ¡ay!
A7 D
adiós mi caballo bayo
A7 D
cuánto he llorado cuando el murió.
FAMOSO ENTRE OTRAS COSAS POR SUS CORRIDOS DE CABALLOS
Y ESA IMPRESIONANTE MANERA DE JINETEAR,
SE GANO EL BIEN MERECIDO SOBRENOMBRE
DE "EL CHARRO DE MÉXICO",
SU PÚBLICO SIEMPRE RECORDARÁ
CON RESPETO Y CARIÑO A
DON ANTONIO AGUILAR