Un tiempo después de la disolución de El Niño Gusano, a principios del 2002, Sergio Vinadé (guitarra/voz) y Andres Perruca (batería) se unieron a Sebas Puente, joven letrista que además atesoraba algunas canciones y comenzaron una nueva andadura junto a varios músicos zaragozanos. Las brillantes melodías de Sergio encontraban feliz acomodo en las letras de Sebas y pronto el proyecto dio sus primeros frutos, grabando maquetas que ya destilaban la esencia del mejor pop, aquel que pasea por un universo propio.
Quatro anos de trabalho duro!Neste mês de maio fizemos quatro anos no ar. Continuamos trabalhando na divulgação deste maravilhoso instrumento, obrigado por participar da nossa história!