Celina y Reutilio: el nombre de esta pareja –nombre tan sonoro como un son montuno– terminó pronunciándose con musical respeto y entrañable afecto en todos los caneyes, en todos los patios, en todos los barrios de las Américas donde se dan cita los hombres y mujeres de cualquier condición para celebrar el ritual jubiloso del baile. Antes, Celina y Reutilio esposo. Luego, Celina y Reutilio hijo. Siempre, la voz hecha de bronce de Celina convocando
Quatro anos de trabalho duro!Neste mês de maio fizemos quatro anos no ar. Continuamos trabalhando na divulgação deste maravilhoso instrumento, obrigado por participar da nossa história!