No tanto. Su nombre es Jil, por las iniciales de Jil Is Lucky. Tiene 24 años y de momento vive en París. Lo hubiéramos visto en los Andes, cruzado en la All Saints Church de Harlem, y también por toda Europa. Hasta dicen que un bar lleva su nombre en India.
Desde hace años, se ha recorrido el mundo en solitario para pulir su pop, no-folk, lejos de los tópicos del género. Durante su vagabundeo entre el ghetto de Praga y los puntos calientes de Sidi Bel-Abbès en Argelia, él encontró a sus músicos.
¡Cuatro años de duro trabajo!Este mes de mayo cumplimos cuatro años al aire. Seguimos trabajando en la difusión de este maravilloso instrumento, ¡gracias por participar en nuestra historia!