Los hermanos Sady y Cristian, acostumbrados a deslumbrar en reuniones familiares con sus cálidas voces y de haber comprobado que se llenaban de aplausos, deciden ir a la búsqueda de espacios distintos. Al poco tiempo y con la necesidad propia que mueve al músico, sintieron que era importante para su armonía, considerar a una tercera voz, que pudiera brindar los elementos que hacían falta. Es así como escuchan su voz en particular, que con su timbre e interpretación deslumbra al igual que los otros.
¡Cuatro años de duro trabajo!Este mes de mayo cumplimos cuatro años al aire. Seguimos trabajando en la difusión de este maravilloso instrumento, ¡gracias por participar en nuestra historia!